Gracias al espléndido puente que teníamos Aroa y yo la semana pasada, decidimos que era la fecha ideal para ir a Valencia con motivo de la exposición Stop Motion Don´t Stop y de paso ver la City con los amigos que viven en ella.
Convenimos que el día que mejor nos encajaba para la visita a la muestra alojada en el Museu Valencià de la Il.lustració i de la Modernitat (MuVIM) era el viernes, así que a través del grupo de facebook STOPMOTIA y aprovechando mi llegada a la capital valenciana, llamé a quien quisiera acercase a ver la expo por la mañana y enganchar con una comida stop-motionera. La respuesta fue tremenda, más de 20 personas se apuntaron. Mac Diego, el comisario de la expo, dio buena muestra de ser un magnífico anfitrión y coordinó la comida, eligiendo el sitio y luchando con la directiva del MuVIM para que la comida nos fuera subvencionada, y aunque dada la situación económica global y patatín y patatán no pudo ser, si que se portaron y nos regalaron a cada comensal uno de los preciosos catálogos que más adelante comentaré.
Aunque habíamos quedado a las 12, nos presentamos a eso de las 11 para dar una primera vuelta de calentamiento y que no nos diera ningún tirón. Al salir desde la boca de Metro de Plaza de España encontramos el edificio del MuVIM muy rápido. Su curiosa arquitectura estaba adornada por una gran pancarta que anunciaba la expo. Íbamos bien. Los amables conserjes del espacio nos mandaron a la planta -2, por lo que dejando las mochilas y cogiendo fuerzas entramos de lleno en la magia.
Un mega cronograma gobierna esta primera sala, el recibidor del stop-motion valenciano. En él se muestra las diferentes trayectorias de animadores como Pablo Llorens, Sam, Javier Tostado, Diego Soriano, Markus Mayer, David Caballer, etc... encontrando que los caminos de unos y otros se entrelazan a lo largo de los años, formando este telar que hoy es objeto de vitrina. En la primera vitrina, se halla un monumento al stop-motion escrito: Una pila de libros que van desde el Film Fantasy Scrapbook de Harryhausen hasta el Making of de Frankenweenie, están dominado por el megacatálogo amarillo. Me gustó comprobar que casi tengo todos los libros que se recogían cogiendo polvo en mi stopmo-theque particular. La antesala se completaba con un mega-avión de una de las producciones de Pasozebra Producciones, que por cierto no conocía esta maqueta y me dejó anonadado, por los puppets del corto cañí El Felipe y La Maripepa de Manuel Ferri, y una parte del decorado del bar donde se desarrolla el excelente corto premiado en Annecy: Història D'Este de Pascual (Pascu) Perez). Este decorado es sobresaliente en todos los sentidos, y al estar poblado de los protagonistas del corto lo convierten en una de las vitrinas más bonitas de la expo.
Dando una pirueta mortal hacia delante, haciendo chocar nuestros traseros en el aire, entramos en la sala de Clay Animation (Javier Tostado), donde... Oh My God! ¡Pero si están Javi Tostado y David Caballer trabajando! Saludos y buenas palabras gobernaron la sala durante unos minutos. De pronto entraron en escena dos viajeros del stop-motion venidos desde Barcelona, los Joan Martín (padre e hijo, que se llaman igual. Más fácil). Más saludos y buenas palabras gobernaron la sala durante unos minutos más al tiempo que veíamos como trabajaban en los inmensos decorados de la serie Clay Kids, pues estaban realizando las promos para Brasil, primer país que va a emitirla. En esta sala también hay que destacar que se encuentran props (objetos), puppets, armaduras, diseños, storyboards y demás parafernalia de la serie y de la opera primera de Javier Tostado como director, el cortometraje El Ladrón Navideño.
Puesto de rodillas, Aroa cogió carrerilla subió sus pies sobre mis hombros, para a continuación impulsarnos a ambos y entrar rodando en la sala de Conflictivos Productions (Sam). Como si de la última escena de En Busca del Arca Perdida, el habitáculo estaba lleno de vitrinas con forma de cajas de madera, sin duda un trabajo impresionante de montaje ideado y coordinado por la mente inquieta de Sam . Unas cajas estabas de lado, otras solo podían verse desde arriba, otras desde un pequeño agujero o desde varios puntos de vista. Dentro de ellas, con una extenuante carga de detalles que hace imposible no tirarse delante de cada una menos de 5 minutos, encontramos escenas de antiguos trabajos del estudio como Insania o Encarna, pasando por los multipremiados Werepig o Vicenta, hasta llegar a las del largometraje Pos Eso, cuyo estreno está previsto para Otoño de 2013. Hay miles de detalles en esta sala, incluso un
buey de mar que fue centollo por unos días...
Para llegar a la mazmorra del jefe final, Aroa ideó un gran plan. Subiéndonos por las cajas de Sam, llegamos a los focos y como si de lianas se tratara nos lanzamos en trayectoria parabólica hacia nuestro destino... Croquetas del espacio, alienígenas multiformes, mutantes, zombies, doctores locos, robots, niños explotados, esqueletos, cocinas transformables, moscas gigantes, Premios Goya tuneados, asesinos, caracoles, ositos de peluche y guardianes espaciales, son solo algunas de las cosas que encontramos aquí. La gran variedad artística de Pablo se pone de manifiesto (another time!), pues es capaz de realizar películas de trasfondo serio (Caracol Col Col), de tinte infantiloide (Doctor Franky), de corte responsable (El Ultimatum Evolutivo), de ciencia ficción gamberra (El Enigma del Chico Croqueta) e incluso de terror con olor a serie Z a lo discípulo aventajado de Roger Corman (Molecular Zombi).
Detrás de esta sala se encontraban unos sofas y sillas, donde dejamos descansar nuestras piernas mientras atendíamos al mal montado documental (sobretodo en el aspecto auditivo) que ante nuestros ojos se mostraba. Ojo! Me consta que Mac Diego ha realizado su versión de este pseudo-docu y que está infinitamente mejor.
Los Joan Martín, Aroa y yo salimos entonces a la entrada principal para encontrarnos con quienes llegasen. Dando una vuelta y volviendo a la -2 nos encontramos con Diego Soriano (master en realizar cualquier cosa en miniatura que ha trabajado en Aardman) Laura Calvo (compañera de fatigas durante mi periplo en STOPMOTIA) Fran Deltell (animador de la serie Clay Kids) e incluso Sam y Pablo Llorens. Saludos y buenas palabras gobernaron toda la expo durante muchos minutos, a la vez que realizaba las fotografías que componen este reportaje.
Llegaron las dos de la tarde y con Mac Diego a la cabeza, que apareció de la nada cual fantasmagoría de Segundo de Chomón, salimos del MuVIM para dirigirnos, tras atravesar el Mercado Central, a la Llotja de la Seda, en cuyas proximidades se encontraba el restaurante Carusel. Una mesa alargada cubría buena parte de la terraza del chiringo y en las sillas se sentaban, a parte de los ya mencionados, personalidades del stop-mo como Sergio Lara (director de animación de Clay Kids), Flora Cuevas (Productora y jefa de vestuario de Conflictivos Productions), Bárbaro Joel Ortiz (creador del corto 20 años), Nestor (dire de foto en Conflictivos), María Moreira y Raul Eguía (RIP Films), Fran J.S.C. (creador de cortos como Tiempo Sombra y animador en varios de los spots de Megablocks a las órdenes de Javier Tostado), Javier Gay (devorador voraz de subcultura) y otro buen puñado de conflictivos, como son Vicente, Angel, Valle, Pablo y Alicia.
La comida fue genial, aunque todo sea dicho que fue por los alimentos pues la paella fue caso aparte. Un ambiente agradable en e que se intercambiaron impresiones sobre la expo, los nuevos proyectos de cada uno, e incluso de si Harryhausen seguía vivo o no. Quizás ya notábamos algo la semana pasada dentro de nuestra stop-mo soul o puede que fuera simple casualidad.
A la llegada al MuVIM, tal como había prometido, Mac Diego abrio una cajota y empezó a repartir Catalogazos y posters. El primero de los catálogos que calló en mis manos pronto fue a parar a las de Pablo, Sam y Javi para que me dejaran su rúbrica y de paso algún regalo en forma de dibujo.
El volumen es impresionante, lo mejor del stop-motion publicado en España junto al gran libro sobre Ray Harryhausen escrito por Carlos Díaz Maroto. Tapa dura, 335 páginas, cientos de fotos en color (muchísimas de ellas inéditas hasta la fecha) son solo alguno de los datos técnicos de un precioso trabajo de maquetado realizado por Mac Diego, aunque sin lugar a dudas la gran diversidad de textos de diversos protagonistas del meollo de la stop-mo valenciana y algunos otros locos a los que nos han dado paso (como el Chokozoltan que escribe estos párrafos). El precio creo que ronda los 20 €, pero de verdad que merece muchísimo la pena hacerse con esta edición que cuenta con una tirada de aproximadamente 1.00 ejemplares.
Para acabar decir que estoy rebosante de alegría de haber visto la expo y haberla podido comentar ante tal compañía. Se esta hablando que es la expo que más visitas ha dado al MuVIM en toda su historia, que es posible que se prorrogue por unas semanas más y hasta de que puede que se convierta en algo itinerante. Ojalá que todo ello pase o que incluso se cumpla el deseo de Llorens de que se instaure un museo del stop-motion permantente en Valencia, aunque él lo dice por el agobio que supondrá recoger todos los trastos que tiene dispersados por las vitrinas...
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Fe de erratas en mi texto del catálogo:
- En la página 30 donde dice: ...,Diego Soriano con ¡Solo saben de beber y drogarse! (2008) y Tiempo sombra (2010),... debería haber indicado que el primero de los cortos está dirigido por Luis Ponce y el segundo por Fran J.S.C., aunque en ambos participara Diego de manera muy activa.
- En la página 34 donde hablo de los componentes de Sukolega nombro a Juán Sarrión, cuando debería haber dicho Iván Sarrión.