Walt Disney Company cumple cien años, así que voy a levantar un viejo bulo patrio que a mí me gusta más que el manido "está congelado, esperando a que encuentren la cura del cáncer que acabó con su vida"; y de paso voy a aumentarlo un poco más, así que no crean nada de lo que lean aquí (o sí).
En el estudio más longevo de la historia de la animación aseguran que el magnate epónimo nació en Illinois en 1901, pero... en nuestra españita se han ido publicando a lo largo de la historia diversos artículos que lo ponen en duda.
El primero de ellos apareció en 1940 como artículo de portada de la revista Primer Plano. Allí se aseguraba que su nombre real es José Guirao Zamora y que había nacido en Mojácar, Almería. Aquella investigación pormenorizada (¡llegaron a entrevistar al cura y al alcalde del municipio!) debió poner de los nervios a Walt, quien aparecía en la prensa como un americano hecho a sí mismo. Ante el temor de que aquella investigación franquista diese al traste con su nombre -un hispano en la meca del cine, ¡ja!-, es muy probable que empezara a mover los hilos para crear una cortina de humo. Que hubiera una sonora huelga en el estudio tan solo unos meses después puede parecer una coincidencia; yo no lo creo.
Los abogados de Disney pusieron una demanda al servicio de inteligencia de Francisco Franco, que se vio obligado a no volver a sacar el tema en ninguna de sus revistas. Por este motivo creó un servicio especial de censura.
Sin embargo, cuando el dictador estiró la pata, la censura fue borrada de un plumazo y ¡zas! de nuevo los investigadores más punteros de nuestras tierras husmearon acerca de la procedencia española de Walt Disney. El medio en el que debía publicarse tal noticia debía ser de gran tirada en el país, así que se optó por la extinta revista erótica Interviu. Corría el año 1981 y ahora se iba más allá que en el año 40, pues se indicaba que Walt no solo era de Mojácar sino que era hijo de una lavandera y de un barbero. A modo de contraofensiva, desde el estudio de animación se pusieron manos la obra para que se hablase de otras cosas relacionadas con el estudio: por eso ese año salió la insulsa Tod y Toby y el admirado libro "The Illusion of Life".
Todo parecía estar ya controlado; los estudios Disney seguían amasando billetes. Pero en 2010 un realizador independiente, Eduardo Soler, decidió hacer un documental para desentrañar de una vez por todas el misterio. El resultado es Disney a través del espejo (2010) que está disponible en Filmin y cuya sinopsis es la siguiente: "Un investigador decide dar el paso definitivo para desentrañar el enigma sobre el supuesto origen almeriense de Walt Disney, haciendo el mismo viaje que realizó la supuesta madre de Disney para entregar a su hijo (Walt Disney) en adopción. Un viaje que nace en Mojácar y acaba en Nueva York. Un documental sobre una investigación apasionante con un resultado inesperado".
El resultado es tan inesperado que Walt Disney Company sigue diciendo que Walt era de Illinois, mismo estado que los Blues Brothers. ¿Coincidencia? No lo creo.